El capítulo 1 del Informe CYD 2023, la decimonovena edición del informe de referencia en la universidad española, analiza las principales cifras que caracterizan a la oferta académica, la organización y la financiación de la universidad. A partir de los datos analizados por la Fundación CYD podemos conocer cómo es el perfil del alumnado, la evolución de las universidades en función de su titularidad y la adecuación entre la oferta y la demanda de estudios.
Las universidades privadas siguen creciendo y acogen al 46,1% de los estudiantes de máster y al 19,1% de alumnos de grado
En el curso 2021-2022 el número de estudiantes matriculados en estudios de grado universitario ascendía a 1.333.567, una cifra ligeramente inferior (-0,2%) a la del curso anterior. En las universidades públicas se produjo un descenso de los matriculados (-1,8%) mientras que en las privadas hubo un aumento (7,5%).
En la última década, en comparación con el curso 2011-2012, se observa un descenso de alumnos matriculados en estudios de grado (-8,5%), pero una tendencia desigual en función de la titularidad de la universidad: mientras que la pública ha perdido más de 200.000 alumnos, la privada ha aumentado en casi 81.000 alumnos más, representando ya el 19,1% de las matriculaciones.
Los estudios de máster siguen sumando alumnos: en el curso 2021-2022, 266.902 estudiantes cursaron esta formación, el 53,9% en una universidad pública y el 46,1% en una privada (esta última ha ganado un 14,4% de estudiantes más respecto al curso anterior). En doctorado había 97.749 estudiantes, la gran mayoría de ellos (93,9%) en la pública.
En España, en comparación con la Unión Europea, hay un mayor peso de la universidad privada, sobre todo en los matriculados de máster, según explica Montse Álvarez, del gabinete técnico de la Fundación CYD:
“La universidad privada se está esforzando por diferenciarse de la pública especializándose en el nivel de máster, el más próximo al mercado laboral. Se observa además una mayor apuesta de las universidades privadas por las enseñanzas híbridas u online”.
Montse Álvarez, gabinete técnico de la Fundación CYD
El número de universidades privadas autorizadas (43) se acerca al de la públicas (50); mientras que el número de universidades públicas se ha mantenido inalterado en los últimos 25 años, el de las privadas se ha multiplicado por 2,7.
Las mujeres son mayoría en la universidad, pero su presencia está por debajo del 36% de los estudiantes de grado en matemáticas, física, ingenierías e informática
En cuanto al perfil del estudiante, el porcentaje de mujeres es superior en todos los estudios: en grado suponen el 56,4%, en máster el 54,9% y en doctorado el 50,2%. En relación con el lugar de estudios, Madrid (21,2%), Andalucía (18,1%), Cataluña (16%), y la Comunidad Valenciana (11,1%) concentran el 66,4% de los matriculados de grado en el sistema universitario presencial español (el 67,1% de alumnos de doctorado y el 71% de máster, en este caso, Madrid acoge el 28,5%). Los estudiantes extranjeros representan el 6% de los matriculados en grado, el 23,3% en máster y el 28,4% en doctorado.
Por tipo de estudios, según datos del SIIU del curso 2021-2022, se observa una presencia menor de la mujer entre el alumnado matriculado en grados de ámbitos como matemáticas (35,9%), ingeniería, industria y construcción (30,3%), física (27,7%) e informática (14,9%), mientras que son mayoría en educación (77,7%) y salud (72,7%).
Según explica Montse Álvarez, del gabinete técnico de la Fundación CYD y a partir de los datos de Eurostat del año 2021:
“En comparación con la Unión Europea, en España hay un mayor porcentaje de mujeres matriculadas. En el ámbito de educación y salud, tanto en España como en la UE, ellas representan más del 70% del total del alumnado universitario. Por ámbito, las mujeres están infrarrepresentadas en ingeniería, industria y construcción (29,8% en España y 27,8% en la UE) y en tecnologías de la información y comunicación (15,4% en España y 20,5% en la UE)”.
Montse Álvarez, gabinete técnico de la Fundación CYD
Las tasas de rendimiento y de abandono bajan respecto a cursos anteriores
En el curso 2021-2022, la tasa de rendimiento de los estudiantes de grado, es decir el porcentaje de créditos aprobados respecto a los matriculados, fue del 77,5%, una cifra inferior respecto a la del curso 2020-2021 (80,5%) y a la del 2019-2020 (84,6%). En el curso 2021-2022, la tasa de abandono del estudio en el primer año se situó en el 18,7%, 3,3 puntos porcentuales menos respecto al curso anterior (22%).
Por género, las mujeres obtienen mejores resultados que los hombres, con una diferencia de 9 puntos a favor de ellas en la tasa de rendimiento, y registran menos abandonos en el primer año. Por tipo de universidad, los matriculados de las privadas muestran una tasa de rendimiento 10 puntos porcentuales superior respecto a los de las públicas. También destacan las mayores tasas de rendimiento en las universidades presenciales respecto a las universidades a distancia. Por ámbitos de estudio, los mejores rendimientos se dan en educación (90,2%) y salud (87,2%) y en el otro extremo están sector primario, informática e ingeniería, industria y construcción, donde la tasa de rendimiento es inferior al 70%.
Aumentan las titulaciones, especialmente los estudios de máster en las privadas
En el curso 2022-2023 se han impartido 9.447 titulaciones en el sistema universitario, lo que supone un aumento del 30% en los últimos diez años en comparación con el curso 2012-2013. Ese incremento se nota especialmente en las titulaciones de máster en las privadas, donde el número se ha doblado.
Si analizamos las titulaciones por tipo de centro, se observa que los grados y másteres de matemáticas y estadística, educación, administración y gestión de empresas e informática han crecido más en las privadas que en las públicas. Las privadas a su vez ofertan más del 35% de las carreras en los ámbitos de educación, salud y administración y gestión de empresas. Las públicas concentran el 90% de los estudios de doctorado.
Las diferencias más notables entre universidad privada y pública se dan en la ratio entre alumnos y titulaciones: en el curso 2021-2022 había un promedio de 341 alumnos matriculados en los grados ofertados por la universidad pública presencial, mientras que en la privada esa cifra desciende a 149 alumnos (las cifras se invierten en máster: 70 alumnos/máster en las privadas y 46 en las públicas). También hay diferencia en cuanto a la modalidad de la enseñanza: en las universidades privadas presenciales el 19,4% de los grados se puede seguir en modalidad híbrida, algo que solo es posible en el 1,7% de los grados de las públicas (porcentajes respectivos, en privadas y públicas, en máster del 47,2% y 16,5%).
Ajuste entre oferta y demanda de plazas
En el curso 2022-2023, el 90,8% de las plazas ofertadas en primer curso en un grado en las universidades públicas presenciales se cubrieron con matriculados de nuevo ingreso por preinscripción, aunque hay diferencias en función de los estudios: en los ámbitos de salud y educación se ocuparon más del 95% de plazas; y en negocios, administración y derecho, ciencias sociales, periodismo y documentación y ciencias, en torno al 93%. Por subámbitos, destaca la plena ocupación en psicología, veterinaria, deportes, enfermería y medicina.
En el otro extremo, turismo y hostelería, dentro del ámbito de servicios, tuvo la menor tasa de ocupación (55%), seguido del sector primario (73%). Lenguas y arquitectura (81%) e ingenierías (86%) son otros de los subámbitos con más plazas vacantes.
Respecto a la elección de los estudiantes para preinscribirse en los estudios de grado en las universidades públicas, cabe destacar que las mayores tasas de preferencia se dan en medicina (donde hay más de 13 demandas por plaza), veterinaria (8,5 por plaza), enfermería (4,6 por plaza), así como en psicología y deportes (3,3 demandas por plaza). Dentro del ámbito de ciencias, destaca matemáticas y estadística (2,7 por plaza), mientras que en ciencias de la vida y ciencias físicas, químicas y geológicas la ratio es de alrededor de 2 por plaza y de un 1,8 en informática. En la parte baja de la lista, hay menos de 1,2 demandas por plaza en lenguas, ingenierías y humanidades, y menos de una demanda por plaza en turismo y hostelería y en sector primario.
Según explica Montse Álvarez, del gabinete técnico de la Fundación CYD:
“Las cifras indican que las necesidades presentes y futuras del sistema productivo del país parecen no estar teniéndose en cuenta a la hora de diseñar la oferta del SUE. Por ejemplo, en las ingenierías ha habido una reducción de las plazas ofertadas dada la débil preferencia de los estudiantes por ellas, cuando es uno de losámbitos de estudio más apreciados por los ocupadores, de ahí sus buenos resultados de inserción laboral”.
Montse Álvarez, gabinete técnico de la Fundación CYD